Que huellas más casuales, seguro que no me he puesto a saltar cerca de la orilla para que quedasen bien marcadas.

No, que va, completamente casual. Jajajajajajajaja.

La verdad es que no tiene una gran anécdota esta foto, así que no voy a escribiros el texto que llevo escribiendo todos estos días.

Esta vez, dejemos que la foto hable por ella misma.